martes, 12 de septiembre de 2017

Reseña: PALEOARTE, de Zoë Lescaze.

Tengo la suerte de tener entre mis manos una joya editada que cualquier interesado en la prehistoria y la paleontología disfrutaría en profundidad. Me refiero al libro "Paleoarte, visiones del pasado prehistórico" publicado en castellano por la editorial Taschen. Para comenzar, es un paso en la historia de este movimiento artístico el que se haya procedido a editar un volumen en diferentes idiomas, acercándolo a todos los públicos amantes del arte y de las criaturas del pasado. Este tomo es actualmente el mayor recopilatorio de obras de diferentes autores de los inicios del paleoarte, llegando incluso a serme alguno de ellos desconocido y puedo asegurar que el lector se sorprenderá ante obras de paleoarte arcaicas que le resultarán totalmente novedosas a pesar de los años que ostentan. El volumen está enfocado al paleoarte anterior a la dinosaur renaissance, por lo cual no encontraremos nada más moderno que Zdeněk Burian. Es curioso que el autor solo considera paleoarte aquellas obras que implican organismos en un paleoambiente, por lo cual no se incluye en el libro la obra de Cuvier. No obstante, desde Duria antiquior de Henry De la Beche el volumen se convierte en un compendio de interesantes obras del paleoarte desde sus origenes a los grandes maestros. Estas obras acompañadas de los textos permiten una comprensión de la evolución no de la fauna, sino de la ciencia y la propia forma de pensar de artistas y paleontólogos.
Entre los puntos fuertes del libro destacan su gran formato, que sirve para apreciar en profundidad el arte; la calidad de reproducción de las laminas incluidas  y el contar con obra de artistas poco conocidos para el público como Demarly, Samuelson Templeton, Kuwasseg, Robert Child y Méheut entre otros. Además dedica numerosas páginas a los grandes maestros como Knight, Burian y Zallinger. Quizás un pero que le pongo al libro es que en el caso de Zallinger solo se incluya Age of Reptiles y no se incluya una breve muestra de otras de sus obras de paleoarte.

En conclusión, una publicación de la que aquellos que disfrutamos de este arte debemos estar agradecidos.



viernes, 18 de agosto de 2017

Especies ibéricas diferentes a las que crees

La mayoría de la ciudadanía va caminando por su propio medio ignorando o sin ser consciente de la diversidad de formas de vida que los rodean. Y no solo esto, sino que en algunos casos donde se presenta interés por conocer, se
Y es que es difícil para los españoles, ya sean estos ciudadanos poco versados en la naturaleza o muchos de ellos interesados, el concebir el potencial de patrimonio biológico y por ende zoológico que tiene nuestra Península Ibérica.

Pues podemos comenzar por un animal que puede sernos muy cercano. No es ni más ni menos que uno de nuestros pájaros carpienteros, el que llamábamos pito real (Picus viridis)
Así lo han demostrado estudios genéticos y evolutivos (Perktas et al., 2011),  los cuales determinan que el aislamiento en territorios refugio por parte de poblaciones en los límites del área de distribucción pueden derivar en la aparición de una nueva especie, como es el caso de nuestro único en inigualable pito real ibérico (Picus sharpei) o pito ibérico para los amigo, el cual carece del antifaz negro completo del pito real, que vive en el resto de Europa.



El caso del sapo. Seguramente cuando leemos o se nos refiere al respecto del gran sapo ibérico se habla de sapo común, una especie que se define con una enorme distribucción euroasiática. Así para muchísima gente, incluso interesada en fauna, el sapo de aquí se clasifica como Bufo bufo. Pues bien, el paso de los años y los estudios comparativos y evolutivos han llevado a decretar que el sapo del sur de Europa occidental es una especie totalmente distinta, Bufo spinosus, conocido como sapo espinoso. Se cree que como se ha visto que se ha repetido con faunas europeas, varias poblaciones del género Bufo que conformaban una misma especie se quedaron aisladas debido al cambio climático en diferentes momentos del Neogeno y el Cuaternario dando lugar a diferentes especies. En el caso de la especie que puebla nuestra Península, se cree que se debió aislar geneticamente de Bufo bufo a partir de las glaciaciones del Pleistoceno (Recuero et al., 2012)



El rabilargo ibérico, una preciosa e interesantísima especie de córvido, es muchas veces referido como la misma especie que se encuentra en el extremo oriental de Asia, cuando ya en 1850 fue catalogada como especie propia (Cyanopica cooki) y es así considerado por multitud en la comunidad científica (Kryukov et al., 2004). Hay incluso leyendas urbanas de gente que cuenta que han sido introducidos en la Península desde Asia (os juro que me he topado con gente así que está muy bien posicionada en la farándula de la fauna y conservación). La cosa es que ambas poblaciones con un ancestro común fueron quedando aisladas durante las glaciaciones lo que derivó en la evolución a dos especies distintas. haciendo de los rabilargos de la Península Ibérica una especie autóctona y única en el mundo.




Y lo mismo ocurre con los topos en gran parte de su distribucción, anda que no me habrán dicho "El topo" o "el topo europeo". Pues bien, tenemos la especie europea Talpa europaea que se distribuye por el norte de la Península y gran parte de Europa. Pero también tenemos el topo ibérico (Talpa occidentalis), especie endémica de la Península Ibérica y que ocupa la mayoria del área peninsular. Y seguramente muchas personas tienden a fusionar ambas especies como un único taxón.

Aprendamos de zoología, preocupémonos por ponernos al día de los que los trabajadores investigadores descubren y valoremos un poquito más todo lo que nos rodea.



Referencias:

Kryukov, A., Iwasa, M. A., Kakizawa, R., Suzuki, H., Pinsker, W., & Haring, E. (2004). Synchronic east–west divergence in azure‐winged magpies (Cyanopica cyanus) and magpies (Pica pica). Journal of Zoological Systematics and Evolutionary Research, 42(4), 342-351

http://www.europapress.es/sociedad/noticia-pinturas-rupestres-mas-impresionantes-espana-no-puedes-dejar-ver-20161013183020.html

Recuero, E., Canestrelli, D., Vörös, J., Szabó, K., Poyarkov, N. A., Arntzen, J. W., ... & Nascetti, G. (2012). Multilocus species tree analyses resolve the radiation of the widespread Bufo bufo species group (Anura, Bufonidae). Molecular phylogenetics and evolution, 62(1), 71-86.

jueves, 23 de marzo de 2017

Cambio radical al árbol filogenético de los Dinosaurios


La ciencia es maravillosa y quienes la hacen se esfuerzan para aumentar nuestro conocimiento día tras día. Pues bien, aunque los dinosaurios son un grupo biológico que siempre nos aporta novedades a su conocimiento, de la que hoy me hago eco puede considerarse un descubrimiento radical que va a marcar un antes y un después crítico en la historia de los dinosaurios.

Hace unos días un trabajo publicado en Nature por  Baron, Norman y Barret titulado "A new hypothesis of dinosaur relationships and early dinosaur evolution" ha planteado un cambio drástico en las relaciones evolutivas y de parentesco entre los diferentes grupos de dinosaurios.

¿A cuantos no os suena la clásica distinción de dinosaurios con cadera de ave y dinosaurios con cadera de reptil que aparecían en nuestros libros para público popular como una forma de introducirnos en la filogenia de los dinosaurios?



Pues bien, tradicionalmente se incluía a los Sauropodomorpha (típicos dinosaurios de cuello largo el lector no familiarizado) y a los Theropoda (dinosaurios depredadores bípedos en su mayoría de los que forman parte las aves) en un clado llamado Saurischia (los llamados dinosaurios con cadera de reptil).





  (arriba) filogenia convencional hasta la fecha en la que Sauropodomorpha y Theropoda conforma el orden Saurischia.


Los resultados del trabajo presentado por Baron y colaboradores concluyen que en realidad los terópodos (Theropoda) no se encuentran tan relacionados con los Sauropodomorpha, si no que están más cerca de los ornitisquios (Ornithischia: dinosaurios con cadera de ave). Para ello enumeran una serie de caracteres que acercan más a los terópodos con los ornitisquios, los cuales asemejan caracteres en los terópodos y los ornitisquios basales, excluyendo a los terópodos de una relación más proxima con lo sauropodomorfos y los herrerasaurios.  Por lo que proponen que la clasificación de los grandes grupos de dinosaurios que ha sido aceptada en consenso durante más de 100 años, es errónea.

Con esta nueva hipótesis a partir de los resultados obtenidos por los paleontólogos, los terópodos serían excluidos de Saurischia y pasarían a ser un grupo paralelo a Ornithischia, quedando como Saurischia los saropodomorfos y Herrerasauridae (Herrerasaurus y afines). Vaya, Herrerasaurus fuera de Theropoda otra vez!
 

Arriba, nueva filogenia propuesta por Baron et al., 2017.

¿Y quienes son estos herrerasaurios? Pues son un grupo de dinosaurios basales, que han sido considerados tanto terópodos como un grupo externo. Incluso como sauropodomorfos basales. En 2012 un trabajo de Novas et al., los incluía como un grupo de basal de Saurischia, uniendo a sauropodomorfos y terópodos en una rama llamada Eusaurischia. (Ver filogenia justo debajo)

Pues bien, el nuevo trabajo concluye que Herrerasauridae son un grupo de Saurischia, por lo cual tampoco serían terópodos, al estar Theropoda como grupo cercano a Ornithischia. Esto tiene su gracia, porque ahora el grupo de dinosaurios que incluye a las aves, aunque sin formar parte del grupo de dinosaurios con cadera de ave (Ornithischia), se encuentra cercano a ellos.
¿Y cómo se ha llamado a esta nueva agrupación de terópodos y ornitisquios? Pues bien se ha decidido recuperar un término empleado por Huxley para agrupar terópodos y algunos ornitisquios allá por 1870. Este término es Ornithoscelida y aquí abajo podéis ver como se encuentra actualmente la filogenia de los dinosaurios según este trabajo.



El planteamiento de esta nueva hipótesis resultado del trabajo publicado en Nature ha dado fuerte en la ciencia de los dinosaurios, golpeando contra lo que teníamos como conocimiento establecido. La cosa es que la ciencia y los investigadores que la hacen continuarán aportando nuevos conocimientos y que lo que hoy es un impacto radical quizá deje de serlo en algún momento o sea rebatida por una nueva hipótesis.

Referencias:

Baron, M. G., Norman, D. B. & Barrett, P. M. 2017. A new hypothesis of dinosaur relationships and early dinosaur evolution. Nature doi:10.1038/nature21700

Novas, F. E., Ezcurra, M. D., Chatterjee, S., & Kutty, T. S. 2010. New dinosaur species from the Upper Triassic Upper Maleri and Lower Dharmaram formations of central India. Earth and Environmental Science Transactions of the Royal Society of Edinburgh, 101(3-4), 333-349.

lunes, 6 de marzo de 2017

Aves migratorias: llegando antes de tiempo

A todo el que tenga más de una veintena de inviernos y que haya crecido familiarizado con la naturaleza que le rodea le será común el apreciar la llegada de las aves migratorias cada año.
Cuando yo era niño mi abuela me decía, por San Blas la cigüea (Ciconia ciconia) verás. Y yo miraba al cielo. Y cuando al fin en Febrero o Marzo alguna cigüeña sobrevolaba mi localidad, bien contento que me ponía. Lo mismo me pasaba con los vencejos (Apus apus) y golondrinas (Hirundo rustica), los cuales me enseñó mi padre gracias a los libros de Felix Rodríguez de la Fuente.
Con el paso de los años y el aglutinar barro y polvo en las botas esta repentina alegría por la llegada de las aves migradoras se ha ampliado a todas las especies.

Lo que viene al caso es que por lo que estamos viendo, cada vez vienen más pronto estas aves migratorias. En mis libros de consulta suelen ubicar a las golondrinas a finales de Marzo y si nos ponemos a mirar trabajos científicos, podemos comprobar que las golondrinas comunes llegaban a tierras españolas allá por el fin de Marzo e inicios de Abril hace tan solo 50 años. Pero que en el siglo XXI nos hemos visto acostumbrados a que estas aves, de media, estén aquí ya para el punto medio del mes de Marzo (Gordo & Sanz, 2006).

Pues para nuestra sorpresa, el 24 de Febrero ya estábamos localizando golondrinas por las tierras del centro penínsular. Ya se adelantan un mes más que hace 50 años!! ¿A qué se debe esto?

Golondrina común (Hirundo rustica) ya en España desde los últimos días de Febrero.

Pero entre las especies fácilmente avistables no solo se ha adelantado la golondrina. El milano negro (Milvus migrans) lleva aquí unas semanas.
En los años ochenta, Bernis (Bernis, 1980) informaba del paso prenupcial del milano negro entre los meses de Marzo e inicio de Mayo. Pues bien, este acipitriforme viajero y polivalente ya lleva unas semanas dentro de nuestra Península.
Un milano negro en posadero.  Desde inicios de Febrero ya los tenemos avistados, pero dentro del colectivo de fotógrafos de la naturaleza hay avistamientos de finales de Enero.

Lo mismo ocurre con otras especies. Críalos avistados en el centro penínsular al inicio del mes de Febrero. Y bueno podemos pensar, es habitual el críalo (Clamator glandarius) es un ave de migración muy temprana, entra en invierno. Pero es que son numerosas las citas por parte de otros fotógrafos que he podido observar.

Críalo en el sistema central.


Es curioso el ver como las aves cambian sus dinámicas al igual que está cambiando el tiempo. Aún hoy, y no hay más que mirar a la administración Trump o algunos incrédulos españoles, continúa el negacionismo al respecto del cambio del clima. Quizás estas variaciones en la llegada de las aves migradoras tenga algo que decirnos sobre lo que va a ocurrir en el futuro.

Referencias:

Bernis, F. 1980. La migración de las aves en el estrecho de Gibraltar.Vol. I. Aves planeadoras. Universidad Complutense, Madrid. pp. 301-327.

Ó. Gordo y J. J. Sanz, 2006. Climate change and bird phenology: a long-term study in the Iberian Peninsula. Global Change Biology, 12